Senderismo invernal – raquetas de nieve
A pesar de que el senderismo es una actividad asociada al buen tiempo, sea verano, primavera u otoño,
¿por qué no disfrutar de un paseo por los espectaculares y relajantes paisajes invernales?
No te pierdas una excursión a pie o en raquetas de nieve y descubre el mágico paisaje nevado y unas vistas panorámicas de ensueño sobre las cumbres nevadas de los Pirineos. Pistas, senderos, bosques y ríos helados se convierten en el medio ideal para vivir una experiencia inolvidable.
El trekking de invierno ofrece la posibilidad de un contacto directo con la naturaleza, no requiere entrenamiento específico, sólo una discreta práctica para las caminatas en la montaña y puede ser practicado por cualquier persona a cualquier edad.
Una excursión con raquetas de nieve acompañado por un guía de montaña es una experiencia única, que trasporta a los que la viven a un pasado distante, cuando cazadores y granjeros usaban grandes raquetas de nieve para moverse con dificultad en los nevados paisajes invernales, pero que, en la actualidad, año tras año disfrutan recreativamente cada vez más personas.
Tipos de raquetas de nieve:
Existen varias clases de formas de raquetas, cada una pensada para un tipo de actividad. En la actualidad la mayoría de las raquetas de nieve llevan incorporados crampones para evitar pequeños resbalones por causa del hielo, aunque en ningún caso sustituyen al crampón clásico, pues no se puede escalar con ellas.
La más tradicional tiene una forma oval, aunque esta se recomienda para niños o personas que midan por debajo del 1.60. En llanuras podremos usar raquetas de paseo de un tamaño pequeño.
Sin embargo, para rutas por la montaña se aconseja raquetas de entre 60 y 80 centímetros de longitud, al igual que para andar sobre nieve polvo, pues en este caso también es conveniente utilizar raquetas grandes y dejar las pequeñas para nieve húmeda y compacta.